Las meditaciones estuvieron centradas en la vocación profética bajo el título “Mi vocación docente es alegre y cordial”, siguiendo el testimonio de personajes bíblicos, se fue profundizando en la vocación profética como directivos y como docentes. En un ambiente de mucho recogimiento, con Adoración al Santísimo Sacramento, Eucaristía y muchos signos, los directivos se reencontraron después de la pandemia, en una actividad espiritual, siguiendo la tradición de participar año tras año de un Retiro Espiritual de dos días".